Dolor - Maldita Palabra - Miguel Rusito Fernández
Cuando el dolor es agrio, vil, tremendo cuando llamarlo dolor es perdonarlo cuando el pecho se aplasta por adentro cuando ya no puedo soportarlo. Pienso en otras cosas, soy cobarde me siento también, oscuro y frágil me imagino el sol, en una tarde pienso en un viaje por el aire. Pero me asalta otra vez, vivo, ladino dejándome sin piel, en carne viva y ya no se dónde huir por un respiro por un poco de sombra fresca, tibia. Mas tiene que doler, es su promesa hacerse grande, duro, insoportable para que el llanto fluya desde adentro destrozando el alma, inexorable.